Dándome el permiso de simplificar, hecho que me cuesta bastante a la hora de exponer algún tema, antes de enumerar los principios de la Terapia Gestalt voy a hacer una muy breve introducción de lo que es, su origen y contexto para dar una pincelada a quién no conozca.
La terapia Gestalt fue creada por el médico alemán Fritz Perls por allá en los años 50 del siglo pasado. Nace de lo que le llamaron, Perls y su esposa en ese momento Laura Perls, “psicoanálisis revisado”. Se fue desarrollando dentro de la corriente de la psicología humanista o lo que le llamaron Tercera Fuerza como reacción al psicoanálisis y el conductismo, que eran las corrientes de la psicología que dominaban en ese momento. La psicología humanista se apoyó en conceptos de la filosofía desde Sócrates, la fenomenología y el existencialismo. Se caracteriza por considerar a la persona de forma global poniendo la atención en sus aspectos existenciales: la libertad, el conocimiento, la responsabilidad, etc… La Terapia Gestalt que creó Perls se nutrió de múltiples influencias filosóficas y terapéuticas como el Taoísmo y el Zen y de ideas desarrolladas por Whillhem Reich, Karen Horney, Jung por citar algunos nombres.
La palabra alemana Gestalt se ha traducido como forma, figura, estructura, su verbo gestalten significa diseñar, dar forma. Se puede llegar a entender Gestalt como forma subjetiva de vivir algo, la propia experiencia. Para Perls era la totalidad de una cosa, la vida misma en continuo movimiento, algo natural a lo que se obedece con la propia autorregulación del organismo.
La Terapia Gestalt puede considerarse una filosofía de vida, una actitud. Fritz Perls decía que no era el fundador, sino el redescubridor de algo tan viejo como el mundo porque no deja de ser una actualización de antiguas tradiciones espirituales y de conocimiento.
La Terapia Gestalt no solo busca sobreponerse a los problemas psicológicos, busca el autoconocimiento a través de la toma de conciencia del sí mismo, el darse cuenta de su propia naturaleza liberándose de los prejuicios y condicionantes de lo que es correcto o deberías, busca la autorrealización y el crecimiento personal a través de la experiencia real y la confianza en su propia autorregulación.
La Terapia Gestalt tiene una visión holística ve a la persona como un todo interrelacionado y pone el acento en la forma, en el cómo más que en el qué, en el contenido o en el porqué. El enfoque no está en lo que le ocurre a la persona sino en cómo lo percibe, en cómo lo vive. Pone la atención más en el proceso, en la experiencia subjetiva.
Haciéndonos así una leve idea del enfoque de la Terapia Gestalt vamos a ver también de manera muy simplificada los principios que rigen la Terapia Gestalt, esta actitud o estilo de vida que nos sugiere darnos cuenta de quiénes somos y descubrirnos a nosotros mismos para ser auténticos.
Vive ahora, es decir, ocúpate del presente más que del pasado o el futuro.
Vive aquí, es decir, relaciónate más con lo presente que con lo ausente.
Experimenta lo real, deja de imaginar.
Siente y observa, abandona los pensamientos innecesarios.
Expresa. Expresa antes que explicar, manipular, justificar o juzgar.
Entrégate a lo que sientes. No evites el desagrado o el dolor, no evites darte cuenta de lo que realmente sientes. No retires lo que también es parte de ti. Atrévete a sentir lo que sientes y así podrás trascenderlo y crecer.
Abandona los debería o tendría, las imposiciones externas, busca en ti tus propias verdades.
Responsabilízate plenamente de tus acciones, sentimientos y pensamientos.
Acéptate totalmente como eres. Con tu luz y con tu sombra. Sé íntegro.
La toma de conciencia, el darse cuenta. Estar en continua atención. Conciencia plena.
Estos principios, si los tenemos presentes, nos facilitan desarrollar un estilo de vida sano, gestionar nuestras emociones para relacionarnos más genuinamente con nosotros/as mismos/as, con los demás y el entorno.
La Terapia Gestalt, en el marco de una sesión de terapia, crea un espacio seguro, sin juicios, una relación de tú a tú donde poder darte cuenta de ti mismo, de cómo estás, de lo que sientes, de cómo vives lo que vives y conectar contigo mismo/a para vivir en paz con lo que eres.
Referencias: «Claudio Naranjo (2017). Terapia Gestalt. Barcelona, España. Ediciones La Llave.»
